Horario De Proteccion Al Menor
Horario De Protección Al Menor
El efecto Madre Teresa, se refiere a los efectos positivos producidos en el cuerpo humano después de asistir a vídeos documentales de la Madre Teresa de Calcuta.
En los grupos de control, se pudieron medir incrementos en los niveles de auto inmunidad del cuerpo, inclusive en las personas que no aprobaban los métodos de la Madre Teresa o que simplemente no les agradaba personalmente.
En el otro extremo, se realizaron experimentos de empatía básica a diferentes grupos de control, utilizando videojuegos violentos. Los resultados fueron una grave desensibilizacion ante el dolor ajeno, los accidentes leves y/o graves. Las imágenes de sufrimiento emocional ante la muerte de un ser querido, también fallan en su natural sentido para despertar, los sentimientos de empatía en los sujetos de prueba.
Estos dos experimentos nos muestran la necesidad urgente de cambiar nuestra cultura de la violencia, por una cultura de La Paz.
Nuestras pantallas, premios y festivales necesitan enfocarse en los valores positivos del ser humano.
La superación personal, las comedias, los documentales educativos e informativos.
Las filmaciones de las cámaras de seguridad en los aeropuertos, donde las personas se reencuentran, las imágenes donde seres humanos y animales se ayudan mutuamente, donde la unión para un bien común, emociona al espectador. Los trabajos de caridad en acción, las muestras de superación personal de personas "discapacitadas." Las clases de Yoga, Reiki, Meditación y toda disciplina no violenta. Los programas de ciencia o series que inviten a la reflexión y a la unión.
La locura de las clasificaciones por edades, es una clara demostración del control ejercido por los CEOs del mundo que tienen no sólo la complicidad de los políticos sino también de actores, directores, escritores y demás que pasan por alto su responsabilidad karmica.
Empero la última palabra siempre la tiene el consumidor.
Mientras continuemos consumiendo violencia, las empresas producirán violencia y todo lo que de ella de-viene y pre-viene.
Consumir cualquier tipo de producción audiovisual, donde la violencia se muestra clara, más los desnudos o las "malas palabras" son censuradas es una marca distintiva de nuestra cultura social, enferma y carente de sentido común.
¿Acaso la exivision de unas tetas, un pene, o una pareja teniendo sexo es más censurable que mostrar seres humanos o extraterrestres lastimándose físicamente unos a los otros con una violencia inimaginable?
La comodidad de ubicarse en el circulo vicioso del drama inamovible para poder contar una historia, hace recordar a los vicios y a las drogas.
Uno de los casos más claros lo tenemos en la serie original, Star Trek la cual fue concebida como la unión de las razas, la búsqueda de la Verdad y de otros mundos, el encuentro de los hijos de Dios regados por todo el Universo.
En el otro extremo, se realizaron experimentos de empatía básica a diferentes grupos de control, utilizando videojuegos violentos. Los resultados fueron una grave desensibilizacion ante el dolor ajeno, los accidentes leves y/o graves. Las imágenes de sufrimiento emocional ante la muerte de un ser querido, también fallan en su natural sentido para despertar, los sentimientos de empatía en los sujetos de prueba.
Estos dos experimentos nos muestran la necesidad urgente de cambiar nuestra cultura de la violencia, por una cultura de La Paz.
Nuestras pantallas, premios y festivales necesitan enfocarse en los valores positivos del ser humano.
La superación personal, las comedias, los documentales educativos e informativos.
Las filmaciones de las cámaras de seguridad en los aeropuertos, donde las personas se reencuentran, las imágenes donde seres humanos y animales se ayudan mutuamente, donde la unión para un bien común, emociona al espectador. Los trabajos de caridad en acción, las muestras de superación personal de personas "discapacitadas." Las clases de Yoga, Reiki, Meditación y toda disciplina no violenta. Los programas de ciencia o series que inviten a la reflexión y a la unión.
La locura de las clasificaciones por edades, es una clara demostración del control ejercido por los CEOs del mundo que tienen no sólo la complicidad de los políticos sino también de actores, directores, escritores y demás que pasan por alto su responsabilidad karmica.
Empero la última palabra siempre la tiene el consumidor.
Mientras continuemos consumiendo violencia, las empresas producirán violencia y todo lo que de ella de-viene y pre-viene.
Consumir cualquier tipo de producción audiovisual, donde la violencia se muestra clara, más los desnudos o las "malas palabras" son censuradas es una marca distintiva de nuestra cultura social, enferma y carente de sentido común.
¿Acaso la exivision de unas tetas, un pene, o una pareja teniendo sexo es más censurable que mostrar seres humanos o extraterrestres lastimándose físicamente unos a los otros con una violencia inimaginable?
La comodidad de ubicarse en el circulo vicioso del drama inamovible para poder contar una historia, hace recordar a los vicios y a las drogas.
Uno de los casos más claros lo tenemos en la serie original, Star Trek la cual fue concebida como la unión de las razas, la búsqueda de la Verdad y de otros mundos, el encuentro de los hijos de Dios regados por todo el Universo.
Comentarios